Peeling ácido hialurónico
El ácido hialurónico es un componente básico de los cartílagos y la piel del ser humano, que posee una alta capacidad de retener el agua.
Por este motivo, y porque reconstruye las fibras que sostienen los tejidos de la piel, desde hace ya varios años se utiliza como ingrediente en productos cosméticos, especialmente para el tratamiento de arrugas faciales, así como para tratamientos estéticos no invasivos (de relleno y aumento de volumen mediante infiltraciones).
El peeling con ácido hialurónico es un tratamiento para renovar y exfoliar la piel, mejorando su textura. Elimina gradualmente, y de forma no traumática, las capas cutáneas más superficiales , aplicando sustancias ácidas de origen natural a dosis progresivas. Está indicado en el tratamiento facial, cuello, escote y manos. Es una técnica idónea para pacientes con arrugas finas o de profundidad media en cara y cuello.
Existen tres grados: suave (indicado en los tratamientos de rejuvenecimiento, con arrugas finas, falta de luminosidad, manchas poco visibles o fotoenvejecimiento leve), medio (indicado para arrugas más marcadas, acné ligero, manchas solares visibles, fotoenvejecimiento marcado) y profundo (indicado para arrugas profundas, piel foto-envejecida extrema, acné severo).
El resultado es una piel nueva, sana y rosada. Eliminamos los signos de envejecimiento, manchas, cicatrices de acné y piel con aspecto cansado. La profundidad de la acción de los peelings y de las cremas depende del producto utilizado, de su concentración y del número de capas aplicadas.
Tras el tratamiento, la piel está más sensible debido a la exfoliación de las capas superiores por lo que se debe hidratar abundantemente y evitar su exposición al sol.