Eliminación de tatuajes
Cada año, miles de personas deciden eliminar los tatuajes de su piel pero, debido a que están hechos con tintas de varios colores, inyectadas a distintas profundidades o en diferentes composiciones, el tratamiento para eliminarlos debe ser individualizado y revisado en cada sesión.
Antiguamente, los tatuajes se eliminaban con métodos agresivos pero, hoy en día, se utiliza el láser para eliminarlos de forma eficiente y progresiva, sin dañar la piel circundante.
Para determinar el tratamiento a usar para eliminar el tatuaje, se debe evaluar a cada paciente: el color, el tipo de tatuaje y la zona en la que está localizado son variables que se deben tener en cuenta para un buen resultado.
En zonas como piernas, brazos y espalda, la tinta del tatuaje se encuentra a mayor profundidad y la piel es más gruesa, por lo que requieren un mayor número de sesiones.
Es un tratamiento que requiere utilización de crema anestésica y pomada antibiótica tras la sesión. Se debe evitar la exposición solar durante un tiempo -que el médico indicará- tras eliminar los tatuajes no deseados.
Es normal que la zona tratada muestre una ligera inflamación o alguna rojez, que remitirá en unos días. El tratamiento de eliminación de tatuajes suele durar entre 6 y 8 sesiones.